jueves, 17 de enero de 2013

Enero hasta el momento

Han pasado un par de semanas desde que me paseé la última vez por aquí, y aunque no me gusta abandonar mi espacio virtual tanto tiempo, esta vez está justificado porque he estado más liada que nunca.


Para empezar el año, con sólo una horita de 2013 y a medio terminar el vaso de Baileys, tuvimos que llevar a Eric a urgencias porque su ombligo estaba verde radioactivo, lo cual derivó en que nos quedamos ingresados allí una semana entera. 6 días de absoluta desesperación encerrados en el hospital turnándonos para ir a casa a dormir, echando de menos a más no poder a Abril, que se quedó con los abuelos, y hablando con todo el mundo para deshacer planes de lo más chulos que teníamos para esos días. Tuve que ser yo la que aguantara a Abril a hombros en la cabalgata porque Mr. Rossi seguía en el hospital y también tuve que grabar un vídeo con la reacción de Abril al ver todos los juguetes de los reyes para que papá no se lo perdiera, pero afortunadamente nos dieron el alta antes de lo previsto porque la infección estaba evolucionando bien y el día 6 por la mañana pudimos salir del hospital.


Después de eso, que nos tuvo tan aturdidos por el hecho de estar cada miembro de la familia en un sitio simplemente esperando a que pasara el tiempo, he recuperado bastante el tiempo. He hecho cosas que no había hecho nunca, y aunque el año ha empezado bastante torcido para mí y para la mayoría de la gente a la que más quiero por contratiempos, estoy segura de que el 2013 va a ser muy diferente, y la manera en que ha empezado ( por la parte buena) es sólo una prueba de ello:


- Por primera vez en mi vida y sin ningún tipo de prejuicios, he hecho botellón. Por lo visto hay que ser madre de dos criaturas y estar terminando la veintena para poder disfrutar de algo que la gente suele hacer en su adolescencia, o al menos así ha sido en mi caso. Para celebrar el cumpleaños de una muy buena amiga, nos fuimos a un parque y nos bebimos las primeras copas de la noche. Nos cayó un chaparrón tremendo pero nos metimos en unos soportales y nos dio igual. Es lo que tienen las experiencias de adolescente, que cualquier cosa que surja, aunque de primeras parezca mala, es motivo de risas. Me lo pasé genial y conocí a gente fantástica. Mi primer botellón, un éxito.


- Después del botellón, a La Riviera a bailar en una fiesta de música electrónica. Otra First Time totalmente exitosa. Me lo pasé increíble y bailé como en mi vida. Una vez más, hay que estar casada y tener hijos para ir a ver pinchar a DJ Marta por primera vez. Maravillosa experiencia compartida con maravillosa gente.


- He estado de cena con mis chicas conociendo la nueva casa de una de ellas. Nos dimos los regalos de amigo invisible (GENIAL el mío, por cierto) y planeamos un súper viaje para el mes que viene. Siempre es un regalo quedar con mis chicas y pasar una tarde con ellas, pero después de un mes y medio sin quedar y más de una semana metida en un hospital, verlas fue una auténtica liberación. Las adoro.


- He cumplido 30 años. A la gente le suele dar muchísimo mal rollo cruzar este límite, yo sin embargo los he cogido con muchísimas ganas. Y para celebrarlo, Mr. Rossi se cogió el día libre y nos fuimos a comer al Hard Rock, nuestro restaurante favorito. Feliz de cumplir años y feliz de haber llegado a los 30 con dos hijos, un maravilloso matrimonio, un montón de amigos, un proyecto a punto de despegar y muchas, muchas ganas de seguir acumulando experiencias.


- He disfrutado de mis niños como la que más. Abril es una hermana mayor increíble. Todo el mundo me decía, o más bien me aseguraba como conocedores de la verdad absoluta, que iba a tener que lidiar con unos celos destructores. No sé, quizá es pronto para hablar, pero desde luego mi hija no ha tenido celos de su hermano ni un sólo minuto. Le adora, le cuida muchísimo, está constantemente pendiente de él, le habla, le acaricia, le tranquiliza y le quiere muchísimo. Mi niño es buenísimo y, aunque le gustan demasiado los brazos, se porta genial y nos deja muchísimo tiempo para nosotros sin que tengamos que estar constantemente pendientes de él, lo que se agradece especialmente por las noches, y mi niña me ha sorprendido muchísimo al hacerme ver que es una niña tremendamente responsable y comprensiva. Se me cae la baba con mis hijos.



Y éstas son sólo algunas de las cosas que he hecho en lo poco que llevamos de año, así que desde luego, he estado bastante entretenida, que es precisamente lo que me he propuesto para este año, hacer miles de cosas con mi marido, con mis amigos, con mis niños y sola, y así olvidarme de todo lo malo que me trajo el 2012.


1 comentario:

La nueva vecina dijo...

Genial!!


Ya echaba de menos tener noticias tuyas por aquí!
Me alegro mucho de que todo haya ido bien finalmente, seguro que lo vais a disfrutar un montón y seguro que Abril será una hermana mayor estupenda!

Que el 2013 te siga trayendo buenas nuevas experiencias!

LNV

Web Statistics