viernes, 31 de diciembre de 2010

Adióoos.....

Otro año más que se va... ayer estuvimos cenando en casa de unos amigos y nos pusimos a hacer recuento de cómo eran nuestras vidas hace un año... en nuestro caso, mi hija acababa de nacer, mi marido no tenía aún trabajo, yo todavía trabajaba en Abengoa, tenía unos amigos que ahora ya no tengo, aún no conocía a Raquel y Rober y tampoco había recuperado aún la relación con Araceli y Jorge, que han sido muy importantes para mí este año. Tampoco Bernabé y yo habíamos retomado aquello tan fuerte que teníamos antes y que tanto echaba de menos. Mi sobrino Sergio aún no había nacido, con lo que la relación con mis cuñados y con mi familia política no era tan estrecha como ahora. En general, las cosas eran peores que ahora.

Lo que me llama la atención es lo mucho que puede cambiar tu vida en sólo un año. Si miro atrás, mi vida a principios del año anterior tampoco tenía nada que ver a cómo acabó el año, así que eso me hace pensar... ¿qué me va a traer este año? ¿qué más me queda por cambiar, si estoy a punto de empezar en un buen trabajo, la relación con mi marido es inmejorable y tengo unos amigos increíbles?. Sólo deseo que todos los cambios, a los cuales estoy muy abierta, sean para bien, al igual que lo han sido en este año 2010 que nos deja, que ha sido bastante duro en muchos sentidos.

Espero que todo el mundo pase una noche maravillosa, y le deseo a todo el que esté perdiendo un poquito de su tiempo en leer esto una feliz Nochevieja y un fantástico año nuevo...







¡Nos vemos el año que viene...!

miércoles, 29 de diciembre de 2010

Mis planes para el viernes

Para mí, la Nochevieja siempre ha sido una noche para pasarla con todos los familiares posibles, para estar ahí con ellos cuando entre el año, y no felicitárselo con una llamada telefónica. Cuando yo era pequeña, el día de Nochevieja mi padre siempre se sentaba a mi lado a la hora de tomar las uvas porque decía que él quería ser quien recibiera mi primer beso del año, y a mí me gustaba tanto que alguien considerara que mi primer beso era algo valioso que desde que soy pequeña me he tomado muy en serio quién es la primera persona a la que le doy mi preciado primer beso del año.

Este año la Nochevieja la pasaré en casita tranquilita con mi marido y mi hija, y ya que mi hija para la hora de las uvas estará por el quinto sueño, mi primer beso será para mi amor, y al estar solos, también serán para él el segundo, el tercero, el cuarto... y no me preocupa cenar solos en Nochevieja en absoluto, pero lo que de verdad me fastidia es que con tantos regalos, este mes no está la cosa para gastos extras y vamos a cenar en casa, como cualquier otro día.

Si pudiera elegir, me encantaría pasar la Nochevieja con mi chico y mi pequeña en una casa rural de los alrededores de Madrid, una como la casa rural de Rascafría a la que me llevó el día antes de que me fuera a Estados Unidos al conocernos, con techos altos y de madera, con chimenea en la habitación, donde te sirven el desayuno con tanto cariño que parece que ya formas parte de la familia. Tomarnos las uvas y dar la bienvenida al nuevo año sentada sobre la alfombra enfrente de la chimenea, calentita, sin importarme el frío que haga fuera...

Me encantaría llevarme la cuna de viaje y acostar a mi niña al calor del fuego para que por una vez duerma sin el ruido del calefactor de aire programado cada 3 horas que calienta su cuarto, para que descanse ajena a las tracas y los petardos que los catetos de mis vecinos se dedican a tirar cada Año Nuevo sin importarles que en el barrio hay bebés a los que el ruido de su diversión les parte por la mitad la noche, y que se despierte por primera vez en su vida sin el escándalo de los perros ladrando, esos perros que sus dueños no dejan entrar en casa y ladran quejándose del frío.

Pues sí, viernes sacaremos el mantel bonito, encenderemos velas, pondremos las copas y cenaremos cordero en nuestra casita, pero las Navidades que viene que nadie cuente conmigo porque me tomaré las uvas en algún remoto lugar donde no haya cobertura y pasaré una noche de ensueño alejada del mundo real...



martes, 28 de diciembre de 2010

Mi jornada

Tengo a Reshma desde hace más o menos un mes. Sí, es muy rica, sí, es muy graciosa, sí, se hace querer un montón, pero hay que ver lo que come, lo que mea, lo que caga, lo que ladra y el por saco que da el animalito...

9.30
Cambia pañal.
Limpia pis.
Limpia caca.
Echa de comer.
Limpia pis.
Limpia pis.
Reshma, suéltame el pantalón.
Reshma, que me sueltes el pantalón, me cago en la leche.

11.00
Limpia caca.
Limpia pis.
Echa de comer.
Reshma, suelta esa pinza de la ropa.
Reshma, sal ahora mismo de mi bolso.
Reshma, deja las zapatillas de Luismi.
Reshma, déjame entrar al baño sola, leches.

12.30
Limpia pis.
Limpia caca.
Reshma, deja a Juno.
Reshma, que dejes a Juno.
Juno, no se muerde el cuello de Reshma.

14.00
Echa de comer.
Reshma, saca la cabeza del cubo de la fregona.
Reshma, que te he dicho que no me muerdas el pantalón.

15.05
Reshma, no ladres, por tu tía.
Reshma, como despiertes a la niña cobras.
Me cago en tu padre, Reshma.

15.07
Sube a poner chupete.
Limpia caca.
Limpia pis.
Tira pelota.
Recoge pelota.
Tira pelota.
Recoge pelota.
Reshma: tú pelota, yo sofá.
Tira pelota.
Recoge pelota.
Echa de comer.

17.00
Limpiar pis.
Limpiar caca.
Limpiar pis.
Limpiar pis.
Reshma, no te subas encima de Abril.
Reshma, no te comas el árbol de Navidad.
Reshma, no se chupa el lavavajillas.
Reshma hija mía, para un rato.

18.30
Ay cariño por Dios, qué ganas tenía de verte.





Sí, es estupendo tener un perrito...

domingo, 26 de diciembre de 2010

Una mañana como marqueses


Esta mañana hemos estado de visita en el Palacio de Linares, más conocido como la Casa de América. Mi amiga Raquel me contó que había estado y que era precioso, y me apetecía conocerlo. Abril lleva unos días malita, y dado que nos ha fallado la canguro que se iba a quedar con ella hoy, nos ha tenido que acompañar.

Mientras nosotros descubríamos los lienzos que decoran el Palacio, Abril ha hecho el descubrimiento de su vida: el eco. Así que hemos disfrutado de una bonita visita guiada por el Palacio mientras nosotros y todo el resto de turistas nos enterábamos de los secretos de los marqueses más o menos así:


- En el fresco que adorna el techo del vestidor de la Marquesa ¡¡PA PA PAAAAAAAAAA PA PAAAAAAAA podemos observar un gracioso querubín que sujeta un espejo, PA PAAAAAAAAAAAAAAA mientras con un coqueto gesto, la Marquesa se atusa el pelo, PA PA PAAAAA PAAAAAAAAAAAA PAAAA PA PA PAAAAAAAAAAAA adornándolo con un sencillo a la par que elegante ramillete florido...PAA PAAAAAAAAAAA!!


Sí, mi hija es una monada, pero nos ha dado la mañana a mí, a su padre, al segurata, a la guía turística y a los otros veintitantos visitantes del Palacio, que nos miraban con cara de "por qué no se llevarán a la criaturita a hacer puñetas". De hecho la guía turística, en un ataque de amabilidad y empatía hacia nosotros, nos ha dicho "yo creo que es mejor que os salgáis fuera, si eso".

Así que nada, mientras el resto de la gente escuchaba todas las anécdotas de la sala de música, el despacho del marqués, el comedor de diario o la sala de baile, nosotros hemos hecho un solitario tour por los pasillos del Palacio, mientras mi hija gateaba por las alfombras imperiales y comprobaba la acústica que producen los largos pasillos de mármol ante el grito de "¡¡PA PAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!".

En la visita había otro bebé, una niña angelical de enormes ojos azules, cuya madre portaba en brazos orgullosa de que su niña ni ha tosido durante toda la hora, y cuando la visita ha terminado, todas las señoras pasaban por nuestro lado con indiferencia dirigiéndose hacia aquel querubín y le decían cosas como "¡eres una muñequita, hay que ver lo BIEN que te has portado!!". Sí señores, esto es tener hijos.

Después de la visita, ya que la casa de América está situada en mi lugar favorito de Madrid fotogénicamente hablando, he intentado hacer unas fotos de mi pequeña disfrutando de su ciudad natal, algo que me apetecía hacer desde hace tiempo, y esto es lo mejor que he conseguido:






Y para una foto que parecía que iba a quedar simpática, mis gafas de sol me han traicionado:





Pues sí, así ha sido mi mañana de turismo en Madrid. Pero eso sí, he aprendido la lección, esta mañana mi niña me ha enseñado que a veces nos esforzamos en entretener a los niños, menearles cuando lloran para que se diviertan, darles objetos para que los investiguen y están un rato distraídos, cuando en realidad, la mayoría de las veces, lo único que necesitan los niños es esto:



sábado, 25 de diciembre de 2010

11 razones por las que me encanta la Navidad

- Por los árboles. Yo soy como Kevin, el niño de Sólo en casa, me pirro por los árboles de Navidad. Todos los años me vuelvo loca viendo los árboles tan originales que ponen en las tiendas, en las casas, en los grandes estableciemientos. Mi favorito hasta el momento, el que ponían todos los años en el edificio donde yo trabajaba, un árbol azul eléctrico, con una alfombra azul eléctrica, con adornos azul eléctricos y con una estrella en los más alto azul eléctrica. El típico árbol verde con bolas de colores ya no se lleva, el concepto de árbol navideño se ha reinventado.

- Por la comida. Cordero, pollo relleno, gambas, turrones, polvorones... y hoy, comida china de diseño, mi favorita.

- Porque recibo muchos regalos maravillosos y puedo hacer regalos maravillosos. Ayer me regalaron un vestido increíblemente bonito y un diario de cuero hecho a mano y que invita a llevarlo siempre en el bolso para escribir en cada momento de inspiración, así, sin pensarlo. Me acertaron tanto que no sé qué me queda para mi cumpleaños. Los regalos que yo hice también fueron un éxito, y me encanta.

- Porque en Navidad siempre me despierto con un "feliz Navidad, mi amor..."

- Porque Madrid está precioso. Este año nuestro alcalde no se ha esmerado mucho y ha repetido luces, pero la verdad que como lo tenemos que pagar todos nosotros, casi mejor que se gaste el dinerito en otras cosas. Pero se lo curra, la verdad que se lo curra, y Madrid luce precioso con tantos colores.

- Porque siempre recibo un montón de mensajes que no me espero deseándome lo mejor.

- Porque me puedo poner guapa, muy guapa. Puedo dar rienda suelta a mi creatividad con mi maquillaje, ponerme esos vestidos que no me pongo nunca durante el año y pasarme una hora entera peinándome. Yo no soy una persona que pueda hacer eso muy a menudo durante el resto del año.

- Por las cenas con la familia. Afortunadamente yo no tengo una de esas familias que tiene casi todo el mundo en la que siempre hay un cuñado pesado que hace comentarios desafortunados y a todo el mundo le cae mal, ni tampoco los niños son de esos que están todo el tiempo dando el coñazo. Mi familia política son todos gente súper agradable en la que todos se llevan bien sin malos rollos y de verdad, con naturalidad. Mis sobrinos son absolutamente encantadores y nos transportan a todos a nuestra infancia. Ayer creímos todos en Papá Noel, que depronto y sin avisar nos dejó a todos nuestros regalos en la buhardilla, y después de cenar jugamos todos juntos a Jenga.

- Porque la llegada del año nuevo me hace hacer balance de los retos conseguidos durante el año y me hace proponerme nuevos retos, y eso me encanta, porque me hace sentir activa espiritualmente.

- Porque gente a la que veo cada mucho tiempo me dice "no te preocupes que hacemos un hueco y nos vemos antes de fin de año". Porque en un corto periodo de tiempo veo a toda la gente a la que quiero y a la que no veo a menudo.

- Porque todos los años me digo a mí misma con convencimiento: "éste va a ser mi año".



Hoy es Navidad, y me siento feliz de poder pasarlo con la gente a la que adoro, mi familia, la familia que yo he creado. Desde aquí deseo que todo el mundo pase un feliz día y que pueda disfrutar como yo de una maravillosa comida en compañía. Feliz Navidad, querido lector...


martes, 21 de diciembre de 2010

Feliz cumpleaños, mi princesa

Hoy es el cumpleaños de mi pequeña, su primer cumpleaños.

Haciendo balance de este año, ha habido momentos muy duros, muchas noches sin dormir, muchos momentos de desesperación al no saber por qué llora, muchas cosas que hoy con mi pequeña experiencia habría hecho de forma distinta. Pero tengo claro que este último año he avanzado un 200% como persona, he aprendido más que nunca sobre la vida y ahora me preocupo por problemas mucho más reales que las superficialidades que antes me traían de cabeza. Mi niña me ha hecho crecer, me ha hecho querer ser mejor persona, me ha hecho convertirme en una persona con ganas de madurar para poder ofrecerle lo mejor para ella y me ha hecho reflexionar sobre mi vida. Además de todo lo que me ha aportado mi pequeña,si yo ya estaba enamorada del mejor marido del mundo, este último año me he enamorado también del mejor padre del mundo, alguien a quien no conocía.

Mi pequeña es una niña simpática, espabilada, obediente, agradecida, lista, y alegre, sobre todo alegre, y me hace sentir inmensamente orgullosa de estar criando una personita que resulta tan deliciosa para todos lo sentidos.

Desde el día que nació estoy haciendo una caja con algunas cosas que me gustaría conservar para regalárselas en algún momento de su vida, como por ejemplo los boletos de lotería del día que nació, el pijama que llevaba puesto la primera vez que la cogí en brazos o una concha recuerdo de su primer viaje a la playa, y espero que algún día ella también pueda leer la entrada que su mamá escribió el día de su primer cumpleaños y sepa que su papá y yo estamos orgullosos de ella e intentaremos que pase el mejor día de su corta vida.



Feliz cumpleaños, mi princesa, tu mamá te quiere con toda su alma.














lunes, 20 de diciembre de 2010

Cachoperra

Esta noche ceno cachorrita al horno...



... lo juro

domingo, 19 de diciembre de 2010

Mis fotos favoritas de la fiesta

Este fin de semana hemos celebrado el cumpleaños de mi niña, que es el martes que viene.

Abril estaba feliz, todo el mundo dándole besos y aplaudiéndola todo el tiempo, además todos sus primos estuvieron con ella para celebrar tan importante evento y le trajeron un montón de regalos, así que estuvo en su salsa total y se lo pasó de maravilla. Éstas son las fotos más representativas de su fiesta de cumpleaños y que demuestran lo bien que nos lo pasamos todos celebrando el primer añito de mi princesa:



domingo, 12 de diciembre de 2010

Mi propia encuesta psicoanalítica

Me gusta mucho la psicología, todo el que me conoce lo sabe. Me encanta pensar en los motivos de la gente para hacer las cosas que hacen, buenas y malas. Nunca sé si los motivos que imagino son los reales de esa persona, pero pienso que todos hacemos las cosas por algo, no porque sí.

Creo en que muchas de las cosas que tenemos dicen mucho de nosotros, como nuestro coche, la decoración de nuestra casa, la forma en que vestimos, la manera en que damos la mano... son cosas que representan muy bien si somos gente práctica, si queremos aparentar, si somos limpios, si somos generosos o si no nos importa lo que piensen los demás.

Analizando todas esas cosas de la gente a la que conozco y de gente a la que no conozco tanto aprendí muchas cosas sobre ellos, y el tema me apasionó tanto que, con el fin de saber aún más de la gente, quise llevarlo al extremo y descubrir muchas más cosas sobre la personalidad de los que me rodean gracias a su manera de usar algo que realmente define nuestra personalidad: el dinero.

Así que a lo largo de los últimos meses le he preguntado a mucha, muchísima gente de todas las edades y de todos mis entornos qué haría si le tocaran los 9 millones de euros del cuponazo, y lejos de tener todo el mundo un propósito parecido, como puede ser viajar, dejar de trabajar y quitarse la hipoteca... algo que siempre he pensado que haríamos todos, me he encontrado respuestas muy, muy diferentes entre sí.

Gente que haría una fiesta enorme e invitaría a todo el mundo para celebrarlo y gente que no se lo diría ni a su familia. Gente que se tiraría a la bartola para el resto de su vida y gente que montaría el negocio de sus sueños. Gente que invertiría cada céntimo con miedo a perder ese gran tesoro y gente que tiraría de tarjeta pensando que un número con tantos ceros es una fuente inagotable.

Me encontré con respuestas que me sorprendieron mucho, como la cabeza tan amueblada de un niño de poco más de 10 años de edad que me contó sin dudar paso a paso lo que haría, incluyendo darle dinero a su abuela para que viviera bien, montar un negocio de lo que más le gusta y quitarle a sus padres la hipoteca, "que sé que les tiene muy preocupados". También me sorprendió mucho un matrimonio cuyos sueños iban completamente en direcciones opuestas. El de él era darle mucho, mucho dinero a todos los miembros de su familia, incluso pedirle la cuenta a ese hermano con el que no se habla para hacerle una transferencia, y después... "no sé, viajar o algo, o comprarme una casa en algún lado por ahí... o no sé, vivir bien, sólo eso", sin tener las cosas muy claras. Sin embargo ella no dudó ni un segundo en que no le daría un duro ni siquiera a su madre, y me dijo bien claro todos los lugares a los que iría y el tipo de casa que se compraría, todo con las ideas bien claritas.

Me sorprendió mucho la respuesta de una persona que lleva toda su vida sin trabajar y me contestó que pagaría para poder trabajar en lo que le gusta. Supongo que a algunos les tienen que tocar 9 millones de euros para plantearse el trabajar. Y me sorprendió mucho también alguien que me enumeró los miembros de su familia y de la de su marido a los que le compraría una casa... gastando así los 9 millones sin que quedara ni un duro para sí misma.

Han sido muchas y muy diferentes las respuestas que la gente me ha dado, y todas ellas me han parecido apasionantes, porque pienso que dice tanto de ti tu manera de responder a una pregunta así... dice de ti si tienes ilusiones y te planteas las cosas, dice también de ti si eres una persona generosa o tus cosas las quieres sólo para disfrutarlas tú, dice de ti si eres realista y te planteas que ese dinero un día se puede acabar, y dice de ti si eres una persona con ambiciones a la que le gustaría usar ese dinero para enriquecerse intelectualmente viajando o estudiando algo que te guste. Eso entre otras muchas cosas que dice de ti tu manera de gastar tanto dinero.

¿Y yo?. Lo primero que haría si me tocara ese dinero sería irme a un sitio tranquilo, una playa o un crucero, a pensar bien en serio qué voy a hacer con mi vida ahora que puedo hacer lo que quiera con ella, no me gustaría precipitarme y tomar decisiones impulsivas. Después daría una pequeña parte a gente de mi familia que llegan a fin de mes con el agua al cuello, y les diría que lo que necesiten me lo pidan, pero no daría dinero a lo tonto a todo el mundo, porque sé que no todos en mi familia van ahogados. Después compraría la casa en la que vivo, la pondría a mi gusto y me compraría un par de coches espaciosos pero normalitos. Gracias a que mi marido es financiero seguramente él se dedicaría a invertirlo con el fin de que siempre nos rentara, y los dos nos dedicaríamos a hacer cursos de lo que nos gusta. Viajaría mucho, mucho mucho, y una vez que mi hija fuera mayor para ir al cole me plantearía abrir un negocio de lo que más me gustara, maquillaje, decoración o cualquier otra de las muchas cosas que hubiera estudiado, y trabajaría en ello. Pero eso sí, tendría mucho cuidado para que mi niña no estuviera consentida y aprendiera a valorar lo que tiene.

Afortunadamente mi marido tiene el mismo sueño que yo si nos tocara todo ese dinero en la lotería, así que pienso que no sería un conflicto para nosotros, al contrario de para otra gente a la que le he preguntado.

En fin, no creo que nunca me toque ese dinero, y qué quieres que te diga, tampoco sueño con ello, pero la verdad, he aprendido mucho, mucho mucho preguntándole a la gente qué harían con sus vidas.

¿Y tú? ¿qué harías si depronto tuvieras ese dinero?.

lunes, 6 de diciembre de 2010

Algunos momentazos de la última semana

- Abril bailando la música techno-hardcore a todo volumen del Bershka mientras yo espero la cola de la caja.

- El chocolate caliente con leche condensada en forma de corazón que me tomé en una de las cafeterías que más me gustan de Madrid.

- Mi marido de pie con la bragueta totalmente abierta mientras yo y mi visita (femenina) estamos sentadas en el sofá con la cara a la altura de, ejem... su bragueta.

- La gente de mi barrio apartándose despavoridos mientras nosotros llegamos con el coche sólo para intentar hacernos sentir como si fuéramos un peligro para la seguridad del vecindario. Patéticos.

- Tres personas que me han dicho que he adelgazado mucho, mucho mucho.

- Mi suegra diciéndome que ahora que tiene internet en casa le tengo que enseñar a meterse en páginas de bomberos.

- Las fotos de mis perras con la corona de la Estatua de la Libertad.

- Descubrir una cafetería vintage maravillosa en Villalba.

- Candace y el capítulo en el que tiene que decidir entre delatar a sus hermanos o irse de compras con Stacey.

- Sergio, mi sobrino de 8 meses, jugando al cucu-trás con la abuela en la cortina totalmente partido de risa.

- Bernabé. Quedar sólos él y yo en una cafetería del centro de Madrid donde se puede fumar y quedarnos hablando hasta más tarde de lo que había previsto. Divino y maravilloso flashback.

- Mi hija tirándole de los pelillos de la nuca a su padre mientras él está en el ordenador.


domingo, 5 de diciembre de 2010

La reina



No hay nada más solemne que una reina en su trono

viernes, 3 de diciembre de 2010

Una nueva Martínez

Me han regalado un cachorro. Bueno, en realidad yo di permiso para que me lo regalaran unos amigos que la cogieron del albergue y al cabo de un mes se dieron cuenta de que no podían hacerse cargo de ella.

Así que después de meditarlo en pareja, como se meditan las decisiones importantes en mi unidad familiar, decidimos que a Juno le vendría bien un poco de compañía y que ahora que estoy en casa quizá es el mejor momento para introducir un nuevo miembro a nuestra familia. Se llama Reshma.

Reshma no tiene nada que ver con Juno, que no hace más que huir de la intensa energía de su nueva hermana cachorra, Reshma es un puro nervio trotante y todo le produce una inmensa curiosidad. En su primera mañana en casa conmigo ha visto un señor negro en la tele y se ha pasado 5 minutos ladrando. Después ha visto un señor con gorra y se ha pasado 5 minutos ladrando. Después ha visto a Ana Rosa Quintana y se ha pasado 5 minutos ladrando. No me extraña, a mí me entran ganas.

Cada vez que ando por la casa, Reshma menea el rabo emocionada ante el movimiento de mis tobillos y se viene conmigo a todos lados para intentar hincarle el diente a mis sabrosos cordones, que deben ser un manjar muy apetecible. Reshma me acompaña a cambiar a Abril, a poner el lavavajillas, a recoger el salón y hasta al baño, lo cual me mola, porque de toda la vida se ha sabido que entre las chicas, ir al baño de dos en dos es guay.

Cuando ya no puedo resistir más el estar tropezándome constantemente con un pequeño ser que habita entre mis dos pies, decido que estaría bien que saliera a jugar un rato y le abro la puerta del jardín, donde se dedica a la caza menor (léase hormigas, hierbas y ramillas que ondean con el viento) mientras yo aprovecho para disfrutar un poco del divino placer de andar, de andar tranquila sin una pequeña bestia mordiéndome los talones.

Abril está encantada con la nueva mascota, ya que, al contrario que Juno, Reshma no huye al verla, Reshma se deja acariciar, es más, le chupetea los pies (sí, con calcetines y todo) mientras Abril está en su trona, lo cual a la peque le hace mucha gracia. Juno sin embargo necesita un poco más de tiempo para adaptarse a tener que compartir su camita, o más bien, a la pérdida de la misma, ya que Reshma, aunque tiene su propia cama, ha colonizado la de Juno sin pensárselo dos veces. Menos mal que Juno no es territorial y ha asumido que esto es lo que hay.

Total, que aunque es un puro terremoto y estamos todavía acostumbrándonos a la nueva habitante de la casa, estamos encantados. Aquí dejo algunas fotos del pequeño osezno que trota por mi casa.




miércoles, 1 de diciembre de 2010

Mi nuevo maestro




Hace unos días con las cartas del banco me llegó esta... cosa. No sé si este señor trabaja con el banco o es indenpendiente, pero por su don creo que merecería un puestecito en la sucursal.

Maestro entre los maestros, 17 experiencias le avalan, ¡17 ni más ni menos! (no específica qué 17, 17 personas, 17 vidas, 17 dedos...) y lo que es más... ¡¡¡TE RESUELVE TODOS TUS PROBLEMAS!!! todos todos ¿eh? TO-DOS: que si un ataque zombi, que si has sido o vas a ser abducido, porque claro, ese don no es cualquier cosa, no, no, no, ¡es hereditario! sí señor.

Tiene tal capacidad de artes ocultas que su poder no es sólo para casos cercanos, ¡¡su poder se puede usar a distancia!! ¡¡el Maestro Marama es como un walkie-talkie!! (eso o funciona por wifi).

Pero no tienes que fiarte del todo de el Maestro Marama, ya que posee poderes ocultos... puede ver a tus enemigos de rodillas (¿¿mis rodillas también tienen enemigos??), hacer que hombres y mujeres estén a mis pies, desintegrar a los demonios del infierno (eso sí me apetece, ¿ves?, desintegrar a los demonios del infierno es algo que siempre me habría gustado hacer), puede convocar a espíritus poderosos para protegerte... él lo puede todo.

Además, como prueba del gran don que posee el Maestro, nos dice que trabaja de 8 a 21 horas, ¡¡madre mía!! ¡si yo trabajara tantas horas también vería espíritus y demonios del infierno!, ¡este hombre trabaja más que Dios, este hombre habría creado el mundo en 4 días y el resto se habría ido de puente!. Y además, habla español y francés, ¡ole, ahí sí que me ha convencido!.

Pero recordad, todo es secreto, shhhhhh... (a pesar de ir propagándolo por todo el pueblo)

He retirado la dirección y el teléfono por seguridad, si alguien quiere hacer uso de los servicios del Maestro Marama que se espere a que le llegue el papelito, no vaya a ser que el Maestro me haya dejado el papelito en mi buzón sólo a mí por ser La Elegida para eliminar los demonios y yo me dedique aquí a poner el teléfono al alcance de cualquiera que pueda hacer un uso indebido de la magia y la experiencia del Maestro Marama. O peor, que se dediquen a llamarle al telefonillo y salir corriendo.

Pues nada, que el Maestro Marama me ha enseñado una forma nueva de ver el mundo, de hecho, voy a cambiar mi currículum y voy a usar el mismo estilo literario que él, a ver si me da buenos resultados y algún día puedo decir que yo también poseo la friolera de 17 experiencias.
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