lunes, 16 de marzo de 2009

Albilla Villalbilla

Tener un blog es un auténtico misterio, nunca sabes quién lo sigue, ni quien lo ha leido alguna vez, ni quién disfruta o aprende con él, ni a quién le ofende. A veces la gente deja comentarios, pero parece que nadie encuentra dónde se pone el firmante, con lo que ahí está, un comentario precioso... y nunca sabes quién lo escribió. Otras veces ves gente que desde un lugar del mundo lo sigue fielmente sin decir nunca ni mu. A veces la gente extraña llega a él porque ha buscado cosas extrañísimas en el Google, o a veces va y te sorprende alguien que navegando ha encontrado tu blog por casualidad, y decide contactar contigo de alguna manera.

Y de esta forma, me he vuelto a encontrar con mi amiga Alba. Irónicamente, llevo unos meses intentando buscarlas llamando a la única de ese grupo de la que tengo el teléfono para que me dé los teléfonos de las demás y poder reunirlas a todas, pero no consigo contactar con ella, y por maravillosas piruetas del destino, al final ha sido mi amiga Alba la que me ha encontrado a mí.

Alba era el anti-yo, físicamente y de personalidad. Ella era bajita, rubita, calladita.... y yo, pues qué voy a decir de mí misma. La verdad es que ya sé que cuando una tiene esa edad, pues tu amiga siempre es tu amiga hasta la muerte, pero ahora, con 26 tacos que me pesan, estoy convencida de que nunca he tenido una amiga a la que haya querido más.

Me acuerdo muy a menudo de sus padres, Paula y Guido, y recuerdo que, aunque yo adoraba a los míos, pensaba "qué guay tener unos padres así....". Me pasé las tres cuartas partes de mi infancia en su casa, así que creo que es justo decir que son responsables de gran parte de mi educación, que es de lo que más orgullosa me siento de mí misma, mi educación.

Mi amiga Alba no sólo me ha traido buenísimos recuerdos en mi cabeza, por si eso no era suficiente, me ha traido un recuerdo visual de un día que ya casi había olvidado:




Yo soy la de la izquierda del todo, y Alba, la de mi lado. Por supuesto, porque en esas épocas, Alba siempre estaba a mi lado.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

gracias a alba he vuelto a saber de ti... cuantos recuerdos y cuantas canciones me vienen a la mente...

soy elena (bartolomé)

es un alegría saberte tan feliz y llena de amor. enhorbuena por tu futura boda!!!

te dejo mi correo a la espera de tus noticias.

muchos besos!!!!!

Anónimo dijo...

acabo de ver que me comí una letra...
esta es la buena

pinpilinpauxas@hotmail.com

Alba Diethelm dijo...

Jo Patri, que me emociono.

Es curioso cómo en estas tempranas amistades marca tanto la familia de la otra persona porque yo también me acuerdo mucho de tu familia, tus padres, tus abuelos, Chelo... y pienso en lo importantes que han sido en mi vida.

Beso gordo

Anónimo dijo...

¡Tú no eres la de la izquierda, sino la de la derecha!!!! La de la izquierda es Almudena, que cantó "Maruja Limón" ¿te acuerdas?
Qué gracias, porque yo hoy he visto a un hombre que era igualito que Guido, he tenido que mirarle dos veces...así que también me he acordado de Alba y de sus padres...curioso. Un beso para ti y para alba también...y para Elena, por supuesto.

Web Statistics